UN NUEVO MARCO LEGAL PARA EL RESURGIR EL GLP
Uno de los factores que han condicionado el retraso del GLP en España ha sido el marco legal al que ha estado sometido durante mucho tiempo. El GLP es un combustible alternativo que puede ser quemado en cualquier motor de gasolina, siempre y cuando se hagan unas adaptaciones. Dicha adaptación debería ser única por motor y modelo concreto de coche, porque ha de cumplir unas normativas de emisiones, de seguridad, etc.
Tradicionalmente, el GLP se ha desarrollado en España en un entorno regulatorio muy desfavorable. Sirvan algunos ejemplos para ilústralo, como pueden ser, -“ la prohibición de homologación de vehículos a GLP hasta el 17 de abril de 2000, la prohibición de conversión a GLP de vehículos privados hasta el 18 de junio de 2003, rigidez en la normativa de construcción y adaptación de estaciones de servicio, o un alta fiscalidad que se ha reducido considerablemente a partir del año 2005 lo que ha permitido experimentar un amplio crecimiento del sector”-.
-“En un primer momento el gobierno español sólo lo permitió instalar en taxis, después se acogió a la normativa europea R115, una normativa muy costosa que requería varias unidades de cada coche/motor y se realizaba para cada instalación por parte de un fabricante. Pero ahora han cambiado las reglas y se puede instalar en cualquier coche que cumpla la normativa de contaminación EURO 3, por lo que todo coche de gasolina matriculado por primera vez a partir del 1 de enero de 2001 ya la cumple de serie y puede ser adaptado a GLP sin necesidad de tener una homologación R-115 para un modelo y motor concretos. También se pueden adaptar aquellos que anterior a esta fecha ya cumplían con esta normativa. Esto ha hecho que las posibilidades de negocio de multipliquen”-.