LA ALIMENTACIÓN NO SE PARA
Economía real, no especulativa
La actual situación de crisis que afecta al mercado nacional e internacional no deja inmune a ningún sector. Todos, en mayor o menor medida han sido alcanzados por la onda expansiva desatada, ahora bien, algunos sectores parecen haber soportado con mejores resultados el envite de la crisis. Un buen ejemplo de ello es el sector de la alimentación.
EL COMPORTAMIENTO DEL SECTOR
En un primer momento podemos pensar que todas las personas tienen que comer, por lo que la crisis no debería afectar a un sector tan básico como es el de la alimentación, pero esto es sólo una verdad a medias.
La crisis no ha afectado al sector en su fisionomía externa, pero ahondando un poco en su análisis podemos ver que esta si ha afectado a algunos puntos de su estructura más profunda.
El sector de la alimentación es uno de los principales motores de la economía nacional. Este sector está al frente de la industria española con cifras que rondan entre el 17% 20% del PIB industrial y un 8% – 10% del PIB español en los últimos años.
Durante los años que llevamos de crisis cabe destacar una balanza comercial positiva con el exterior como consecuencia de la caída de importaciones por encima del de las exportaciones. Estas continúan creciendo a un buen ritmo con tasas superiores al 10%.